GEODIS, aprovechando las últimas tecnologías en los sectores aeroespacial y de defensa
Preguntas más frecuentes
La logística aeroespacial abarca todos los pasos necesarios para mover y almacenar mercancías (incluidos productos acabados, piezas de repuesto y componentes) dentro de la cadena de suministro aeroespacial y de defensa. Cuando se hace bien, garantiza la entrega a tiempo y el cumplimiento de las condiciones de los contratos aeroespaciales.
Falta de control y visibilidad en toda la cadena de suministro mundial.
Problemas geopolíticos y geoambientales que afectan al flujo de mercancías.
Gran dependencia de unos pocos proveedores o transportistas para entregar partes de las mercancías, lo que reduce la resistencia de la cadena de suministro aeroespacial.
Manipulación y almacenamiento de mercancías de gran tamaño.
Falta de trabajadores cualificados en la gestión de estos bienes técnicos. Incapacidad de prever y satisfacer la demanda del mercado de forma inteligente.
Se prevé que la industria aeronáutica crezca a un valor CAGR del 25.5% de 2022 a 2027. Para aprovechar este impulso de crecimiento, sería beneficioso asociarse con un proveedor de logística aeroespacial habilitado para la tecnología que tenga alcance mundial, experiencia en su sector, capacidad para prever las tendencias futuras y ofrecer la perspectiva operativa adecuada.
Elaborar y ejecutar un plan de logística aeroespacial completo y ágil.
Coordinarse con una red de proveedores, transportistas y terceros proveedores de servicios de logística aeroespacial.
Mantener el control sobre los niveles de inventario y los flujos de transporte.
Crear planes de contingencia para gestionar el flujo logístico en caso de interrupciones a.
Analizar periódicamente el rendimiento logístico para ajustar la ejecución de la logística aeroespacial.
En la logística aeroespacial, hay tres niveles de proveedores que prestan apoyo a los fabricantes de equipos originales aeroespaciales y al ejército: Nivel 1, Nivel 2 y Nivel 3. El nivel 3 fabrica los componentes básicos que se envían a las empresas de nivel 2, que los ensamblan en subsistemas. A partir de ahí, los subsistemas se envían a los proveedores de nivel 1, que fabrican los componentes o sistemas principales que se envían a los OEM.